Tuvimos la oportunidad de platicar con una estudiante de la Ingeniería en Logística del Transporte...
Mitos del Derecho
Como interesado en el área de Derecho, seguramente has escuchado muchos mitos que rodean a esta gran carrera que se ha practicado por muchas décadas y que tiene diferentes percepciones que están muy arraigadas en el inconsciente colectivo social.
Alrededor del Derecho giran muchos mitos que pueden confundirte o motivarte a estudiar esta carrera que tiene un gran impacto en la sociedad.
En los próximos párrafos se pretende analizar algunos mitos del Derecho que han venido asentándose dentro de las facultades de leyes. No se trata de hacer un presagio apocalíptico de la abogacía, sino un examen consciente desde la realidad de los estudiantes, que podrá ser clave para los futuros juristas y aquellos que demandan claridad en su horizonte profesional.
“Estudiando Derecho puedes dedicarte a lo que quieras”
Cierto. El Derecho es una de las ciencias sociales y humanas con mayor campo de aplicación. Como bien ha sido debatido en los salones de clases de las diferentes facultades del país, esta ciencia social permea desde la sencilla tarea de la compra de un pasaje para usar el "transmilenio" hasta los riesgos derivados de la utilización del servicio. En este orden de ideas, es innegable que el Derecho es un medio para llegar a un fin determinado, pero no es el único y en ocasiones tampoco es el más importante.
“Los abogados no tienen vida”
Totalmente falso. El abogado tendrá la vida que decida llevar. El mercado laboral del Derecho es lo suficientemente grande para que un recién egresado escoja el camino que desee y lo cambie sobre la marcha, si así lo decide. No todos están condenados a ser esclavos de aquellas firmas con una presencia agresiva; ello dependerá en gran medida de los principios, valores e intereses de cada persona.
Antes de tomar cualquier decisión de índole laboral, debes evaluar cuáles son las expectativas del trabajo, los compromisos por adquirir, las prioridades del desarrollo personal y la proyección a futuro. En este orden de ideas, será responsabilidad tuya escoger la vida que desees, ponderando y buscando un equilibrio entre todos los aspectos que incidan en ello.
“Los abogados son tramposos”
Falso. En cualquier profesión, lamentablemente, existen personas que no ejercen su carrera acorde al sentido social que cada una tiene. En el caso de los abogados, esta realidad ha generado un sentimiento de desconfianza por parte de la comunidad hacia ellos.
El abogado debe realizar su mejor esfuerzo para perseguir y proteger los intereses de su cliente dentro del marco legal y ético. Esta formación básica y primaria del profesional del Derecho responde a un proceso educativo desde las facultades de leyes de cada universidad, que forman seres humanos antes que profesionales.
El abogado debe distinguirse por su correcto comportamiento, lo cual con seguridad hará que sea bien valorado.
“Al estudiar Derecho, solo podrás ejercer en ese país”
Cierto. Cada país tiene un ordenamiento jurídico propio conformado por normas, procedimientos e instituciones singulares. Sin embargo, las facilidades que existen en la actualidad para acceder a la información han mermado esa distancia física y cultural que en algún momento se constituyó como el obstáculo más grande, permitiendo entender que en las diferencias hay oportunidades de crecimiento.
Actualmente es posible que profesionales de diferentes lugares del mundo puedan colaborar y cooperar para estructurar políticas públicas con base en las experiencias y los conocimientos jurídicos de su país. Por lo general, muchas instituciones del Derecho son iguales a nivel mundial porque los principios generales son comunes.
Ello facilita el entendimiento del ordenamiento foráneo y la posible cooperación internacional.
“Los abogados se deben identificar con las emociones del cliente”
En varias ocasiones, los clientes consideran que los abogados deben sentir lo mismo que ellos, pues así realizarán una defensa más eficaz. De esta manera, identificándose con las emociones del cliente, el abogado será su proyección, solo que dotado de las habilidades legales necesarias para lograr resultados excelentes.
Esta creencia es la que motiva que el cliente vea con malos ojos las relaciones de compañerismo y cortesía entre los abogados adversos.
“Los abogados conocen plenamente y dominan el derecho aplicable a su asunto”
Cuando un cliente accede a un abogado da por hecho que el profesional tiene los conocimientos técnicos necesarios para resolver su asunto jurídico, sea cual sea la especialidad a la que corresponda la materia controvertida. Sin embargo, los abogados, si bien conocen el Derecho y realizan un constante proceso de estudio y actualización en áreas muy específicas, no disponen del conocimiento técnico que el cliente presume.
“Un abogado joven ante un abogado veterano es derrota segura”
A la hora de comparar a los defensores, el cliente se deja llevar por la idea, no exenta de certeza, de que la veteranía es un grado y talento, por lo que inclina la balanza a favor del abogado más experto.
El cliente no solo desconoce que el perfil del asunto encargado es clave para determinar el resultado, sino que el talento y especialmente la dedicación del joven abogado al estudio y preparación del caso pueden ser definitivos en sala.
Te invitamos a ver el siguiente vídeo sobre otros mitos del Derecho, tema impartido por el Mtro. Carlos Trejo.
También te invitamos a leer el artículo: ¿Por qué estudiar Derecho en la Universidad Cuauhtémoc Querétaro?
Descarga el plan de estudios de la carrera de Derecho de la Universidad Cuauhtémoc Querétaro.
Fuentes
https://www.youtube.com/watch?v=hkSYJ6YISYg
